Halcón Cerámicas y Ceraworld Cerámicas apuesta por BREEZAIR para resolver el calor en sus instalaciones
En las dos plantas de producción de Halcón Cerámicas, ubicadas en la provincia de Castellón, la zona de esmaltadoras generaba un área térmicamente problemática y difícil de llevar para los trabajadores que allí desarrollaban su trabajo. El calor interno sumado al alto nivel de humedad ofrecía un entorno sofocante.
Otra característica que regía el proceso productivo era la necesidad de evitar que la velocidad del aire no perturbase el flujo de esmalte que impregnaba las baldosas a través de las campanas de pintado. No tener en cuenta esta limitación podía afectar a la calidad del producto.
La solución fue diseñada por el distribuidor de la marca BREEZAIR, mediante la aportación de Aire Fresco BREEZAIR en los pasillos de trabajo y generando una difusión del aire controlable y modificable. Aunque el aire aportado también tiene un nivel elevado de humedad, esto no afecta negativamente, sino que beneficia por ser un aire de menor temperatura.
En la empresa Ceraworld Cerñamicas, ubicada en la población de Onda, el calor soportado formaba parte de los comentarios diarios durante los meses próximos al verano. El calor climático, las condiciones constructivas de la nave y el calor generado por los hornos del proceso de producción hacían del ambiente de trabajo una situación difícil de soportar.
Durante los últimos años se habían sopesado soluciones como la extracción de calor de la nave y la generación de aire en movimiento, que consiguiera disminuir el sofoco que los trabajadores venían padeciendo. Sin embargo, nada de esto había sido suficiente para conseguir una solución que impidiese hacer del calor el protagonista en las condiciones laborales.
La instalación de 4 unidades bioclimatizadoras BREEZAIR, fue la solución para la zona de calor extrema, que se encontraba próxima a los hornos de secado y donde el calor de radiación complicaba las condiciones. Los bioclimatizadores, instalados sobre la cubierta, impulsan aire refrescado y filtrado en la zona de trabajo a modo de ducha, generando una burbuja de aire de mucha menor temperatura con un mínimo coste de funcionamiento.
El resultado de la inversión, a valoración del responsable de producción, ha sido sorprendente y se estudia dar tratamiento similar a otras zonas problemáticas de la planta de producción.
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